El artículo “La iglesia del Monasterio Benedictino de la Santísima Trinidad de Las Condes. Propuestas precedentes”, del arquitecto chileno Rubén Muñoz, ha sido publicado recientemente en arquitecturarevista, publicación digital (ISI), de UNISINOS, Brasil
Referido de su tesis doctoral en desarrollo: “La iglesia del monasterio benedictino de la Santísima Trinidad de Las Condes. La luz como generatriz del espacio moderno litúrgico”, este artículo junto con enunciar los puntos centrales de dicha tesis, se centra en las propuestas precedentes del caso, abriendo relaciones inéditas, que ayudan a entender los principios que subyacen en una obra paradigmática de la arquitectura moderna latinoamericana.
Abstract: comprender una obra a cabalidad será siempre un acto inconcluso. Este artículo, con su origen en una tesis doctoral en desarrollo, pretende avanzar en el conocimiento de una obra patrimonial paradigmática de la arquitectura chilena: la iglesia del Monasterio Benedictino de la Santísima Trinidad de las Condes (1962-1964), la primera obra moderna declarada monumento nacional en Chile (1981). A modo de memoria genealógica, se propone una revisión de los precedentes del proyecto. Por un lado, se presentan una serie de propuestas desarrolladas al alero del Instituto de Arquitectura de Valparaíso. Al respecto, junto con los proyectos desarrollados para el monasterio por Jaime Bellalta (1953-1954), cabe destacar las propuestas encabezadas por Alberto Cruz: la Capilla de Pajaritos (1952) y los estudios para la iglesia del monasterio (1960). Por otra vía, en el contexto internacional, se presenta la relación, hasta ahora inédita, con la Iglesia San Pedro Mártir del español Miguel Fisac, en el teologado dominico de Alcobendas en Madrid (1955-1960), matizando así el análisis historiográfico que ha sufrido tradicionalmente la obra sobre su filiación corbusiana. Finalmente, desde los precedentes estudiados, centrados en la comprensión arquitectónica de los requerimientos litúrgicos, se enuncian tres aspectos que se consideran centrales en el caso de estudio, aspectos que continuarían plenamente vigentes para la arquitectura sacra contemporánea: la “luz como generatriz de la forma”, la “dramatización del acto litúrgico” y la arquitectura como “máquina simbólica”.